El 6 de mayo de 2008 se sabrá la sentencia


El próximo martes 6 de mayo a las 10hs. se sabrá la sentencia para...

Irineo Rojas: el primer sujeto que entró a la maderera de Hugo Iraizoz, donde también trabajaba el hijo del dueño Nahuel Iraizoz. Esta persona lo único que hizo al ingresar con Nahuel como rehén a la oficina de Iraizoz padre fue disparar, sin pedir o exigir nada, no vino a robar, ya que tampoco dio el mínimo indicio de que se trataría de un robo, sólo una vez reducido dijo hay dos más afuera.
Se negó a declarar en todas las etapas en que tuvo oportunidad (previamente a la etapa del Juicio, durante la etapa de debates y aún luego de los alegatos, reforzando su silencio aún el 14 de agosto, día del hecho).

Victor Hugo Sierra: el sujeto que llamativamente había dejado su auto estacionado contramano en la colectora opuesta a la que se encuentra la maderera, tuvo tiempo de fumar un cigarrillo, tomar un abrigo de su vehículo, agarrar su arma, dirigir el tránsito, y cruzó la avenida hacia el lugar del hecho donde había según él más de 6 personas en una actitud sospechosa, de las cuales él mismo dijo saber que una se trataba del hijo del dueño. A pesar de todo ello, llegó a metros de Nahuel.
Nadie, casualmente sólo Etchechury, escuchó que Sierra se identificara, nadie lo vio mostrándole la credencial a Nahuel. La coartada que planteó, a pesar de testigos propios, no le permitió confirmar que ese día pasaba por allí ocasionalmente mientras supuestamente se dirigía a cubrir un adicional, que de antemano debía cumplir otra persona. Inclusive, el entrecruzamiento telefónico terminó de perjudicarlo. Actualmente éste Cabo de la Policía Bonaerense está exonerado y con arresto domiciliario.

Nahuel y su padre lograron desarmar al primer sujeto que entró a la fábrica.
Luego con su celular, mediante el cual intentaba comunicarse infructuosamente con la policía y el arma del delincuente llegó directamente a metalúrgica de al lado en busca de ayuda, pidió que llamen a la policía.
Entrando nuevamente a la maderera, un empleado de la misma lo advirtió de que su padre le manda a decir que el sujeto dijo que hay dos más. Allí Nahuel se habrá percatado de que Sierra era uno de los dos más. Varios testigos escucharon a Nahuel que en voz muy alta pedía a Sierra que se identificara, que parara, que no lo conocía, sin embargo, él vistiendo de civil seguía avanzando hacia Nahuel. Evidentemente, Nahuel atemorizado produjo un disparo intimidatorio, al cual Sierra respondió levantando el arma y según testigos apretando el arma, gatillando, a pesar de que la bala se le trabó y no salió, razón que obligó a Nahuel a provocarle un disparo, que lo dejó actualmente en silla de ruedas.

Alejandro Cesar Etchechury: Supuestamente de paso por allí decidió intervenir en el hecho disparandole a la cabeza, en posición de tiro, con una poderosa arma y previamente a habiéndose colocado un chaleco antibalas. Ya que dice haberlo confundido con un delincuente.
A pesar de haber sido Policia Federal
, disparó directamente a Nahuel en la cabeza y sin que éste lo viera, de perfil. Excepto su hijo, quien también dice haber estado de paso por allí, nadie escuchó que Etchechury se identificara.Sin embargo los testigos explican con detalle la actitud y la forma de disparar. Nunca le realizó los primeros auxilios básicos ante esa situación, además escapó del lugar en un remís. Además alude que Nahuel giró y disparó, situación que a pesar de la gran cantidad de testigos que había en el lugar nadie más que él, vio o escucho.

La hipótesis de la familia es que fue un crimen político que vino a cometer el primer sujeto que sería ultimado por Etchechury con el disparo a la cabeza que erróneamente recibió Nahuel. Así como Sierra estaba de campana afuera de la maderera. De éste modo, Hugo Iraizoz, ex funcionario municipal y propulsor del movimiento vecinalista que pretende desde hace varios años un Nuevo Municipio integrado por tres localidades, sería asesinado por Rojas quien al salir a la calle recibiría el disparo en la cabeza de parte de Alejandro Etchechury, propietario de la Unidad Básica que poseía en su propia casa, la cual desmanteló durante los 11 días de agonía de Nahuel, asiduo jugador de ajedrez en la esquina de la maderera donde mató al joven, además amigo confeso de Alberto Colmer, Delegado Municipal de aquel entonces.

Casualmente un testigo, Sargento Ortiz que por entonces trasladó a Rojas a una curación testificó durante el Juicio Oral y Público que el reo dijo: Si yo hablara van a caer muchos, Intendente, Delegado… Ante preguntas de la Sra. Presidente del Tribunal..., Ortiz dijo: Intendente es el Intendente, Delegado Municipal es el de Longchamps.